La primera exposición de nuestro vuelo Venezolano fue en el malecón de Puerto Colombia donde pudimos compartir con hormigas y animales de todo el continente nuestra obra del Plan Colombia. Para ayudar a convocar a las especies en el malecón, dos hormigas músicxs de Argentina tocaron tinkus y cumbias en solidaridad con nuestra propuesta. Así poco a poco fueron llegando todos los animales, quienes quedaron encantados con nuestra toma del espacio público para enseñar y compartir las realidades que se muestran en la obra. Las especies presentes reaccionaron positivamente y pudieron comparar y darse cuenta de lo que están viviendo y de cómo son sus realidades. Aportataron en su mayoría, que apoyan al presidente, pero son bastante críticos con los individuos que están en el gobierno y el partido, quienes se están aprovechando del proceso para favorecer sus intereses individuales y económicos. Fue algo impactante para nosotras como abejas poder compartir la obra en un espacio público sin tener temor a los desconocidos que se acercaban. Acá las cosas no son nada perfectas pero, por lo menos, no existe la represión que nos rodea en nuestra tierra de Colombia. Estando afuera de nuestra tierra divina reflexionamos colectivamente sobre cómo la represión y violencia tristemente es una cotidianidad Colombiana.
Como abejas, en este momento, estamos creando nuestras propias perspectivas de cómo es la realidad del llamado proceso Bolivariano ya que es nuestra primera vez acá. Aunque apenas han pasado un par de semanas, lo que hemos visto es algo muy distinto de lo que muestran en los medios internacionales, pero también de lo que el Estado dice de sí mismo. Acá, en los bosques y playas tropicales del parque, la cosa que más nos ha impactado es la cantidad de basura, específicamente plásticos, que están tirados por todas partes en lo que es supuestamente una zona protegida. También nos sorprende que esta basura no es solamente de los animales que han migrado de otros lados para visitar el lugar, sino que también, una gran parte vienen de los animales nativos de la región. Desde el comienzo, nos preguntamos qué especie de movimiento revolucionario no tienen educación ambiental y la creación de la consciencia para proteger la ecología de su propio territorio como una base de su proceso? Apenas estamos conociendo, pero veremos como son los contextos en otras partes de la región en nuestro recorrido. Antes de salir en vuelo, pudimos compartir el comienzo de junio y las celebraciones de San Juan Bautista.
------------------------------------------------------------------------------------------------
After a long migration, the South American bees land in the National Park Henri Pittier in the state of
Our first showing on our Venezuelan flight was on the malecón of Puerto
As bees, we are in a moment of creating our own perspectives of what is the reality of the so called Bolivarian process in what is our first time being here. While it has only been a pair of weeks, what we have seen is quite different from what is shown through the international media though also distinct from what the State says about itself. Here in the tropical forests and beaches of the park, what has impacted us most is the amount of trash, especially plastics, that are littered about everywhere in what is supposedly a protected area. We are also surprised that the trash is not only left behind by only the animals who are visiting from afar though also a significant amount of the litter comes from animals native to the region. From the start, we ask ourselves what kind of revolutionary movement does not have environmental education and consciousness raising to protect the ecology of one’s own territory as a base of its process? We are just getting to know, though we will see what the contexts are like in other parts of the region during our route. Before taking off for our next destination, we were able to share in the opening of June and the beginning celebrations of San Juan Bautista.
No hay comentarios:
Publicar un comentario