jueves, agosto 22, 2013

Inicia el Paro Agrario en Colombia mientras siguen las liberaciones de tierras por parte de ASOQUIMBO



Ya han pasado más de cuatro meses desde que los Afectados por el Proyecto Hidroeléctrico El Quimbo (ASOQUIBMO) iniciaron liberaciones de tierras no destinadas a ser inundadas, de propiedad de Emgesa-Endesa-Enel,  la empresa constructora de la represa.  Las liberaciones de las fincas comenzaron con predios en el Municipio de Altamira, pero al poco tiempo ocurrieron también liberaciones exitosas en fincas de Garzón, como las de Santiago y Palacios. En todas las fincas liberadas se encuentran familias campesinas afectadas por el P.H. El Quimbo, trabajando las tierras y cultivando maíz, plátano, yuca, fríjol, ahuyama y practicando la ganadería. 

A pesar de que la empresa y la Autoridad Nacional de Licencias Ambientales (ANLA) han hecho todo lo posible por no cumplir con la Licencia Ambiental, ni por respetar los fallos recientes de la Procuraduría Nacional a favor de las comunidades afectadas, las liberaciones de tierras por parte de los afectados por este mega-proyecto satisfacen una obligación de la empresa misma, que es la de “restablecer y restituir legal y legítimamente la actividad productiva, la seguridad alimentaria y el derecho al trabajo y una vida digna” a toda la población de la zona.  Las liberaciones de tierras no son invasiones,  más bien son las acciones necesarias para garantizar una vida digna para la población afectada y la soberanía alimentaria para toda la región, como está reconocido en la licencia ambiental.

En junio la INCANH (Instituto Colombiano de Antropología e Historia), que antes había sancionado a Emgesa-Endesa-Enel  por la destrucción de piezas arqueológicas, decidió que la empresa es ahora la entidad responsable de crear un museo dentro de la zona de afectación del Quimbo, con lo que debe hacerse cargo de los restos de los ancestros de la población afectada. Entre tanto,  la empresa  contactó a arqueólogos de la Universidad Nacional de Bogotá para realizar estudios arqueológicos en distintas regiones del Quimbo. ASOQUIMBO rechazó esta iniciativa de inmediato, y Jaguos por el Territorio documentó a los arqueólogos durante sus estudios en La Jagua, mientras saqueaban huesos humanos y cerámicas de las tumbas que iban encontrando. En una reunión de socialización con la comunidad de La Jagua, los arqueólogos y un oficial de la empresa se refirieron a los restos como “basura”,  y confirmaron que tienen planeado destruir los petroglifos de la zona de los zanjones con la idea de crear una réplica, lo cual sería un insulto al patrimonio ancestral del territorio.

El 14 de agosto el Consejo del Municipio de Garzón gestionó en la cabecera municipal un debate entre Emgesa y ASOQUIMBO. Después de unas ponencias de los concejales, donde detallaron lo que la licencia ambiental del P.H. El Quimbo obligaba, tanto ASOQUIMBO como la empresa intervinieron. Lo que se demostró es lo que siempre se ha dicho: que la empresa no ha cumplido con nada y que el Ministerio de Ambiente no le ha obligado. A raíz de esto, el Consejo Municipal  rechazó el Plan de Ordenamiento Territorial (P.O.T.) y solicitó al Ministerio de Ambiente que la licencia ambiental se suspenda de manera inmediata, hasta que la empresa cumpla a cabalidad con la licencia ambiental.

Del 8-11 de octubre se realizará el Encuentro y Movilización Internacional por otro Modelo Energético en Neiva y en la zona de afectación. El foco de este  encuentro internacional es la reflexión y el diálogo sobre el neocolonialismo corporativo  y la necesidad de construir un Modelo Energético  Alternativo  “de-centralizado y eficiente basado en plantas de energía renovable de pequeña escala que acerquen la generación de energía al consumo, que garantice la participación efectiva de las comunidades locales en la toma de decisiones, de planificación y gestión y que no perjudique la salud de las personas y del medio ambiente”. El Encuentro contará con la participación de delegados de Europa, Centro y Sur América y de otros lugares afectados por la construcción de grandes represas.

Hace unos meses se anunció que en agosto iba el Paro Nacional Agrario,  al cual ASOQUIMBO se sumó. Los Huilenses no sólo hemos salido a protestar y manifestarnos en contra de los atropellos de Emgesa-Endesa-Enel, si no también reclamando los incumplimientos por parte del gobierno nacional a los Cafeteros a raíz del Paro de comienzo de año, en contra de la privatización de las semillas por medio de la resolución 9.70 como parte del Tratado de Libre Comercio entre EE.UU. con Colombia que ya ha tenido un impacto devastador entre los arroceros de Campoalegre, en contra de los abusos de otras empresas transnacionales en el Huila, como la petrolera Emerald Energy en los Municipios de Gigante y Garzón, y en descontento con la empresa Hydrochina, a quien se le otorgó en concesión el Río Grande de la Magdalena en su totalidad como parte del Plan Maestro de Aprovechamiento del río Magdalena. Aunque el Huila ha sido reportado como poco activo en este paro, la verdad es que si ha habido movimiento. En Hobo en el cruce de Algeciras,  3 mil campesinos bloquearon la vía cuando la policía y el ejército atacaron a las personas resultando en varias personas heridas.

El 20 de agosto los pescadores, las pescadoras y sus familias enteras vinieron del embalse de Betania (de Hobo, Campoalegre y Yaguará), tomándose la Alcaldía del Hobo con canoas y atarrayas para exigir sus derechos. Hace un año la Controlaría falló en favor de los pescadores para que fueran incluidos como afectados en un nuevo censo de la empresa, ya que no fueron incluidos inicialmente. Hasta el día de hoy, la empresa no hecho nada para reconocer a las personas que dependen de la pesca en el embalse de Betania. El pescador Julio Cleves Cuellar explicó que “con la construcción de la represa de El Quimbo, con la constante mancha de aceite, gasolina, petróleo, grasas, los químicos de aligeramiento para empastar el cemento de los muros, con la tala de bosques,  han contaminado el río. La mayoría de peces murieron".  

Aunque zonas del país como Boyacá, Cauca y Nariño han salido en su totalidad desde el 19 de agosto, el Huila se ha demorado salir en una gran parte por la indecisión de los cafeteros que ya anunciaron que salían este sábado. Lo que es cierto es que entre los intereses energéticos y las políticas extractivas,  entre la agro-industria y la militarización, ya no va a haber Huila para los Huilenses. Ya no es una cuestión de querer salir al paro,  si no que el Estado no nos deja otra opción. Se ha convertido en una responsabilidad salir al paro si se pretende intentar salvar un territorio que puede proveer una vida digna para nosotr@s y nuestras futuras generaciones.